Doncella, Madre o Vieja: ¿dónde encaja una mujer de cuarenta años? Las mujeres que han recurrido a la espiritualidad feminista para apreciar las formas de conocimiento de las mujeres han luchado contra el concepto restrictivo de la Triple Diosa.
Aunque ya no críe niños, una mujer puede no estar preparada todavía para ser una "anciana sabia". La Rueda de la Vida de la Mujer ofrece un nuevo arquetipo para esta mujer: la Matriarca. La Matriarca es la Reina de la Cosecha, que recoge los frutos de un trabajo y un esfuerzo continuados, en la cima de su poder sexual y profesional.
¿Por qué trece arquetipos?
En algunas culturas, especialmente las indígenas, el trece se considera un número sagrado. Hay trece ciclos lunares en un año; trece meses lunares en el calendario precristiano. Aunque las doce primeras etapas de la Rueda de la Mujer son secuenciales, la decimotercera etapa -el Transformador, en el centro- tiene la función especial de permitirnos avanzar y retroceder en la vida, saltando intuitivamente a una etapa que va más allá de nuestros años o volviendo a otra por placer o consolidación.
De Hija a Hermana de Sangre, de Madre a Amazona, de Hechicera a Arpía, esta obra innovadora revela el gran patrón de la vida de las mujeres, rico y complejo, bello y misterioso.