Aspectos kármicos de Saturno ✨
- Despertar Dimensional
- 1 abr
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Saturno, el Señor del Karma, simboliza las deudas que debemos resolver en esta vida. Es la ley universal de causa y efecto, que nos recuerda que cada uno lleva sus propias cargas y lecciones kármicas.
Su signo, posición en las casas, aspectos (especialmente conjunciones) e incluso su grado revelan los ecos persistentes de acciones pasadas. Las lecciones de Saturno surgen a menudo cuando nos resistimos al cambio o nos aferramos a un control rígido, pero es importante recordar que también puede significar equilibrio y un flujo natural de los acontecimientos.
La influencia de Saturno nos enseña que el tiempo y la paciencia son fundamentales y que el camino para superar sus pruebas reside en aceptar la responsabilidad por las acciones pasadas.
Saturno es un espejo que refleja nuestras acciones pasadas y sus consecuencias. La forma en que nos enfrentamos a ellas determina hasta qué punto aceptamos las lecciones kármicas de Saturno.
Una capa más de significado: más allá de indicar simplemente un punto focalizado de dificultad o frustración, la colocación de Saturno también señala dónde podemos alcanzar potencialmente nuestro mayor éxito y logro en la vida.
Hay un par de posibles razones para ello.
Una es que, desde el punto de vista de la reencarnación, Saturno puede mostrar dónde tenemos la mayor reserva de experiencia acumulada de vidas anteriores; con ello, naturalmente, viene una considerable acumulación de habilidades aprendidas, por muy lentas que parezcan en desarrollarse esta vez. Por analogía, pensemos en el tiempo que tarda en coger velocidad un tren de mercancías con cien vagones que uno con sólo cinco o diez.
Otra razón del enorme potencial que encierra Saturno se centra en la dificultad y la lucha que nos plantea. En otras palabras, el enorme esfuerzo que Saturno requiere para hacer frente a sus problemas puede conducir a un considerable nivel de maestría, a lo que a menudo me he referido como el lado «tardío» de Saturno.
Saturno es un espejo que refleja nuestras acciones pasadas y sus consecuencias. La forma en que las afrontamos ahora determina hasta qué punto asumimos las lecciones kármicas de Saturno.
Algunas de las lecciones kármicas de Saturno:
Autoidentidad y confianza: Saturno en la primera casa puede exigir autodominio.
Finanzas y valores: Saturno en la segunda casa puede cuestionar los hábitos financieros y la autoestima.
Comunicación y hermanos: Saturno en la tercera casa puede poner de manifiesto dificultades en la comunicación o en las relaciones entre hermanos.
Dinámica familiar y seguridad emocional: Saturno en la cuarta casa puede traer lecciones kármicas relacionadas con la dinámica familiar y la seguridad emocional.
Expresión creativa o alegría: Saturno en la quinta casa puede restringir la expresión creativa o la alegría.
Trabajo y salud: Saturno en la sexta casa puede enfatizar la disciplina en las rutinas diarias, el trabajo y la salud.
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Aleksandar Imsiragic
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